MIENTRAS SICARIOS MATABAN A DOS PERSONAS Y DEJABAN HERIDAS A OTRAS DOS EN CAÑETE, CHUI SOLO REALIZABA UNA DE SUS INTERMINABLES E IMPRODUCTIVAS REUNIONES DEL COMITÉ REGIONAL DE SEGURIDAD CIUDADANA

CONTRADICCIONES DE LA VIDA. Si hay que reconocerle un primer lugar al actual gobernador regional de Lima Nelson Oswaldo Chui Mejía, creemos que ese es el haber fracasado en seguridad ciudadana a nivel de las 9 provincias y los 128 distritos de la región, porque hasta la actualidad no aplica el tan promocionado "Plan Cuadrante", ni cosa parecido para frenar la ola delictiva que castiga a la población que prometió en campaña proteger de la delincuencia.

En el colmo de males, mientras Nelson Chui, en su condición de presidente del Comité regional de Seguridad Ciudadana llevaba a cabo una de sus tantas improductivas reuniones en el Palacio Regional de Huacho, en Cañete ese mismo día, sicarios acababan con la vida de un dirigente vecinal y al asesor jurídico de la municipalidad provincial de Cañete, y además dejaban heridas a otras dos personas en un restaurante de dicha provincia de la región.

Y la pregunta que resulta de la realización de dicha reunión del Comité regional de Seguridad Ciudadana es ¿Para que sirvió que se reunirá dicha instancia una vez más?, si la delincuencia sigue haciendo lo que mejor le parece a nivel regional y es más los asesinatos del crimen organizado, prácticamente se dan en sus propias narices e incapacidades.

La prueba es que cuando Nelson Chui se reunía en Huacho, en la provincia de Cañete sicarios acababan con la vida del actual asesor jurídico de la municipalidad provincial de Cañete Luis Enrique Nuñez Palomino y del dirigente de las Pampas Lindo Topara Rodil Palacios Gonzaga (cariñosamente conocido entre sus amigos como "El Paisano").

SIN REACCIÓN

Lo que es peor, la gestión de Chui no da indicios de querer reaccionar ante asesinatos como los que acaban de conmocionar terriblemente a Cañete, porque ni siquiera tiene un plan de contingencia en casos como lo ocurrido en el sur de la región Lima.

No sabemos que tiene que pasar para que el gobierno regional de La Familia ponga en vigencia de una plan para frenar los embates de la delincuencia y el crimen organizado que han puesto a las principales ciudades de la región como las más peligrosas del país, pero parece eso no importarle en lo más mínimo al cuestionado gobernador regional Nelson Chui.