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Para el ex Procurador Anticorrupción de Cañete, Dr. Robert Deza Quispe, la acción de hábeas corpus presentado por la consejera regional Liliana Torres no es más que una estrategia que busca que recusar a la Sala Liquidadora que la viene procesando por el caso Telefónica-Asia.
“La estrategia que están siguiendo los abogados de Liliana Torres pretende sacar a toda la Sala y sea una nueva la que vuelva emitir sentencia, o vuelva a hacer nuevo juicio oral sin toda la carga de conocimiento que se llevó la anterior Sala”, señaló.
El ex procurador ve en este hábeas corpus una orientación que pretende hacer recusaciones, “bombardeando a la Sala”, para hacerlos caer en el palito de adelantar opinión, y luego recusarlos y luego cambiarlos y que haya nuevo juicio.
Sobre el supuesto caso de vacancia o suspensión de ambas autoridades indicó que están sujetos a ciertos plazos, y si se cumplen los presupuestos deberán de actuar los regidores (para el caso de José Arias) y los consejeros (para el caso de Liliana Torres).
Al referirse a las declaraciones del presidente regional Javier Alvarado que señaló que este caso es político, sostuvo que no es así toda vez que este es un proceso penal que se arrastra de hace varios años y por el mismo hecho hay ya un ex alcalde purgando condena en el penal, por lo que estamos hablando de una cosa natural, precisó.
“El se está adelantando , ya que ha visto el caso de Numa Rueda –que es similar al suyo- y más bien debe poner las barbas en remojo en vez de tratar de politizar el tema”, precisó Deza Quispe.
El hombre de leyes fue puntual en señalar que siendo este un caso de un delito cometido por funcionario público en contra del patrimonio del estado, los plazos se duplican “si estamos hablando de 12 años como máximo, hablamos de 24 años y recién han pasado 10 todavía no culmina el período, por lo que no se puede hablar que se busca la prescripción”, concluyó.
(Víctor Hugo Cárdenas Pachas)
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