El aforo del caudal del río Cañete, ha llegado a más de 200 m3/s, la más alta durante la presente temporada 2013 y, esto ya tiende a destruir las defensas ribereñas naturales (bosques de la faja marginal), las otras defensas precarias instaladas el año pasado y las defensas con enrocado ejecutados en el año 1997, cuando el temible FENÓMENO DE EL NIÑO provocó una devastación jamás vista por esta generación.
El clamor, el auxilio, el SOS, de vecinos y pequeños agricultores solicitando apoyos preventivos desde hace mucho tiempo, recién fue escuchado el lunes 18 por la Presidenta del Comité Provincial de Defensa Civil, alcaldesa María Montoya y recién se le ocurre hacer trabajos en este río cargado hasta los tuétanos. Esto es vergonzosamente una demostración de incapacidad y desconocimiento del tema.
Pero esto no es la excepción, igual ocurrió con los anteriores alcaldes provinciales que jefaturaron el Comité de Defensa Civil. María Montoya y Berly Francia, recién cuando el río amenaza con desbordarse, activan el COE, ponen a funcionar la oficina, se acercan al río para solo mirar el pánico en la cara de los vecinos y llevando prensa adulona y florera se marquetean en todos los medios como los abanderados en DESASTRES NATURALES Y DIPLOMADOS EN GESTIÓN DE RIESGOS.
Sin embargo ser PRESIDENTA DE DEFENSA CIVIL de estos tiempos, es cumplir cabalmente con todas las normas, procesos, tratados, estrategias, innovaciones, planificaciones, etc. También es haberse –siquiera- capacitado en Gestión de Riesgos de Desastres, es conocer al detalle todos los antecedentes de los peligros y zonas de emergencia, es haber elaborado con precaución y antelación los planes de PREVENCIÓN, CONTINGENCIA, MAPAS COMUNALES DE PELIGROS, ANÁLISIS DE RIESGO, esto con la participación de las comunidades involucradas. Lo triste es comprobar que nada de esto se ha hecho.
Sin embargo María Montoya y Berly Francia están en otro planeta, y, ahora ante la amenaza de desborde por todos lados del río increíblemente actúan como bombero, solo para simular ante sus seguidores, que están apoyando, cuando en realidad no se dan cuenta de la colosal fuerza hidráulica que tiene el rio ahora, y que se hace imposible poner a trabajar maquinarias de gran potencia.
Increíblemente recién el lunes 18, al unísono, tanto la Municipalidad Provincial de Cañete y el Gobierno Regional de Lima, responsables de los Comités de Defensa Civil, han comenzado a ejecutar trabajos en sus respectivas competencias, alegando incluso que aquellos son obras de prevención. Sin embargo, las obras de prevención para los ríos de fuerte caudal, se tienen que ejecutar durante los meses de junio a noviembre y, no en febrero o marzo, caso contrario significan actos de negligencia, despilfarro, incapacidad y corruptelas.
Aquí las cosas están claras, tanto María Montoya como Javier Alvarado, están esperando que el río colapse y produzca una devastación inmensa para justo ejecutar la declaratoria de emergencia, con el único objetivo de agenciarse algunos fondos económicos sin control. Eso es lo que sospecho, sino porque hasta la fecha los relacionistas públicos como Hernán Medrano y Giovanni Reza, no informan oficialmente sobre falta de obras de prevención oportunos en el río.
(CRISANTO LAURA CUEVA/ELARQUIM)
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