martes, 20 de noviembre de 2012

ESTE PUERTO SUPE EXISTE, FUE SEDE DEL VI FESTIVAL DE POESÍA CIELO ABIERTO

Evento contó con la presencia de Fernando de Szyszlo, Arturo Corcuera, poetas nacionales e internacionales
Como siempre el gobierno regional de Javier Alvarado dio la espalda a gran acontecimiento literario  histórico y cultural
Casa de Arguedas, al fondo la vivienda de Blanca Varela
Momentos muy emotivos por las exposiciones de sensibles creaciones poéticas y reencuentro con el pasado histórico literario que por aquellos extraños designios que tiene la vida separó un lugar de privilegio en la historia para Puerto Supe, distrito de la provincia de Huaura, región Lima, que lo catapulta como "cuna de la literatura peruana", se vivieron en esta ciudad del 17 al 18 de noviembre durante el VI Festival de Poesía "Cielo Abierto".

Como debió ser, esta edición fue dedicada a rendir un homenaje póstumo a la poetisa Blanca Varela, quien tuvo un papel notable dentro de la poesía nacional e internacional, y cobró relevante interés para Puerto Supo por haber sido una de sus ilustre moradoras.

Durante los dos días que duró la actividad cultural, llegaron hasta el puerto, como lo hicieron de manera frecuente  hasta los años 1960, el laureado pintor y ferviente demócrata Fernando de Szyszlo Valdelomar, esposo de Blanca Varela y el destacado poeta Arturo Corcuera Osores.

Los poetas visitantes destacaron las bondades que tiene la sede de Cielo Abierto durante el 2012, coincidiendo con los motivos que llevaron a Blanca Varela, José María Arguedas, Arturo Corcuera, entre otros, a elegirla como un lugar permanente para impulsar su creación literaria.

Durante la actividad literaria en el puerto, realizaron recorrido y paraje obligado por el muelle  de ENAPU para acercarse al mar que inspiró a los literatos mencionados, las casas de Arguedas y Varela, en este último caso su vivienda terminó en manos de Luis Banquero Rossi. 

Todo este evento tuvo como buen anfitrión al burgomaestre Evedardo Vitonera Herrera y el Rotary Club de Barranca, con Jhon López como uno de sus dinámicos coordinadores. 

Pero como siempre, en este caso el gran ausente, no solo porque nunca llegó, sino por no haber aportado con ningún sol al evento, fue el presidente regional Javier Alvarado, quien si se esmera por donar dinero y cosas en las pantallas de televisión nacional, pero vergonzosamente le da la espalda a la cultura, al pasado histórico literario sin igual que tiene el norte chico, que podría convertirse en un gran soporte para el impulso del turismo histórico en la región, que nivel. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario