martes, 8 de noviembre de 2016

LOS ASESINATOS Y LAS EXTORSIONES VOLVIERON AL NORTE CHICO

Mayoría de los integrantes de la banda 'Los monos de Quepepampa' se hallan libres. Su paradero es un misterio para las autoridades quienes temen el retorno de la violencia

A una semana del fallo judicial que dejó libres a 29 sujetos acusados de integrar la organización criminal 'Los monos de Quepepampa', el norte chico volvió a ser azotado por la inseguridad y la violencia. En una jornada lamentable, un policía resultó muerto durante una intervención y dos comerciantes fueron heridos de bala por presuntos extorsionadores.

Los casos se produjeron la noche del domingo en la provincia de Huaral, donde la banda denunciada por el Ministerio Público e investigada por la Dirincri vendría operando con absoluta impunidad, apoyada incluso por malos efectivos policiales. Ambos casos son relacionados por las circunstancias en que sucedieron.
Cobarda ataque

Alrededor de las 7:00 p.m., el alférez PNP Luis Limaco Huaylupo, de 24 años, y otros efectivos de la comisaría de Aucallama realizaban un operativo en el kilómetro 65 de la Panamericana Norte, cerca del sector conocido como 'Aucallama Beach', en la jurisdicción de Chacra y Mar.

Alertados de recientes robos y de un atentado en el mercado mayorista de Huaral, detenían a cada vehículo que transitaba por la zona a fin de identificar a los conductores. Fue en esas circunstancias que detuvieron una camioneta roja de lunas polarizadas, de placa F0Y-605.

Según contaron sus compañeros, el alférez Limaco se acercó al conductor y le solicitó sus documentos. Hizo lo propio con los demás ocupantes del vehículo y luego se dirigió a la patrulla a fin de verificar posibles requisitorias. "Cuando volteó y empezó a caminar, uno de los sujetos le disparó por la espalda", contó un suboficial.

Fueron varios disparos los que ejecutaron los delincuentes, algunos de ellos impactaron en el vehículo policial, desde donde los agentes trataron de repeler el ataque.

Pese al intercambio de disparos, los hampones lograron escapar y abandonaron la camioneta a unos pocos kilómetros. Tras su ubicación, se conoció que había sido robada en el mes de mayo en la misma zona donde fue abandonada.

Aún con vida, pero gravemente herido en el abdomen, el alférez Limaco fue derivado al hospital de Chancay, donde los médicos hicieron lo posible por salvarle la vida, pero la bala había alcanzado órganos vitales y murió poco después de un paro cardiorrespiratorio.
Comerciantes baleados

Poco antes del ataque al policía, dos comerciantes habían sido baleados en los alrededores del mercado mayorista de frutas García Alonso, en Huaral. Por esta razón, la región policial ordenó a las comisarías montar operativos en todo el sector, a fin de hallar a los responsables.

Los comerciantes heridos fueron identificados como Armando Rafael Lévano Salinasy Wilmer Quispe Mejía, quienes se dedicaban a la venta de naranjas. Sujetos armados los emboscaron cuando se retiraban de su negocio y les dispararon en distintas partes del cuerpo. Ambos fueron evacuados al hospital de Huaral, donde se conoció que su estado es de gravedad.

Fuentes policiales revelaron que eran víctimas de extorsión por parte de delincuentes de la zona, y que se habrían negado a pagarles.

Sus familiares, por temor a represalias, prefirieron no declarar. "No es la primera vez que los atacan, anteriormente les habían enviado notas amenazantes y también balas", reveló un efectivo.

Estos ataques se suman a los sufridos el domingo 29 de octubre por los suboficiales PNP Juan Alvarado Zevallos y Carlos Gonzales Gómez, quienes fueron atacados en Barranca cuando realizaban trabajos contra el crimen organizado. 

Ministro Basombrío: “No vamos a parar hasta atrapar a los asesinos”
"No vamos a descansar ni escatimar esfuerzos para encontrar a los autores de este cobarde crimen. Donde quiera que estén, los buscaremos hasta que sean entregados a la Justicia", declaró indignado el ministro del Interior, Carlos Basombrío, al referirse a la noticia de la muerte del alférez Luis Limaco.

Asimismo, calificó el hecho como un "ataque cobarde" y se comprometió a ayudar a los deudos en los trámites necesarios para que reciban los beneficios que les corresponden. 

Pon otro lado, el mayor PNP Julio Sánchez, comisario de Aucallama y jefe directo del alférez Limaco Huaylupo, junto al alcalde Pedro Salguero y otras autoridades de Aucallama despidieron con honores al oficial abatido, quien fue sepultado la tarde de ayer en Huaral.
Fuente: La República

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