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En un final de infarto, Uruguay, equipo por el que pocos apostaban tras su debut con derrota ante la sorprendente Costa Rica, superó por la mínima diferencia a Italia y clasificó a los octavos de final del Mundial de Brasil 2014. Diego Godín, a los 81 minutos de juego, marcó el único tanto del encuentro.
Cesare Prandelli y Oscar Tabárez se jugaban todo en este partido: equipo que ganaba continuaba en competencia. Y esta vez fueron los sudamericanos quienes siguen en carrera. Tras un primer tiempo de pocas emociones, la expulsión de Claudio Marchisio cambió la temática del partido y se vivieron unos últimos quince minutos de infarto.
Al termino de la primera mitad del partido entre Uruguay e Italia pero ambas selecciones quedaron al debe. Hasta el momento, el equipo que aprovechaba el resultado es el italiano, puesto que el empate le alcanzaba para seguir en carrera.
En una primera etapa muy trabajada, los dirigidos por Oscar Wáshington Tabárez salieron con mayor intención de llevarse los tres puntos, único resultado que les vale para continuar en la cita mundialista, pero sin poder transformar estos intentos en goles. La más clara fue para Luis Suárez, quien tuvo un mano a mano que fue bien resuelto por Gianluigi Buffón.
Por el lado italiano, lo más resaltante fue un tiro libre de Andrea Pirlo, quien desde muy lejos probó los reflejos de Muslera. El otro lado de la moneda fue Mario Balotelli. El 'Nene' se ganó la cartulina amarilla por excederse en el juego brusco.
En la segunda mitad la tónica del partido no cambió hasta la expulsión de Marchisio. El volante italiano le entró muy fuerte a Egidio Arévalos Ríos y se ganó la tarjeta roja. Desde ese momento, Uruguay pisó un poco el acelerador, aunque eso no se terminaba de notar en la cancha.
LA MORDIDA DE SUÁREZ
Una jugada curiosa para cualquiera, menos para Luis Suárez -que ya está acostumbrado a hacerlo- se dio en el 78'. Él, en un forcejeo en el área terminó mordiendo en el hombro al defensor italiano Giorgio Chiellini, recordando el incidente que protagonizó en la Premier League cuando hizo lo propio con Ivanovic, defensor del Chelsea. Sin embargo, en esta oportunidad el árbitro no se percató de lo ocurrido y todo siguió de manera normal.
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