DEVASTADOS. Unas cuatro familias prácticamente lo han perdido todo por la crecida del río Huaura, los huaicos, inundaciones y deslizamientos que se han dado en estos meses en la cuenca Huaura Oyón y que radican en el kilómetro 77 de la carretera Sayán Churín, sector de San Miguel, del centro poblado de Puna, distrito de Naván, provincia de Oyón, región Lima.
Las turbulentas aguas del Huaura, que crecieron una barbaridad por las torrenciales lluvias, han arrasado con casi la totalidad de sus plantaciones de frutales, sepultados sus viviendas y dejado aisladas a las cuatro familias que se ubicaron en el sector de San Miguel.
Lo increíble es que estas cuatro familias que lo han perdido todo hasta el momento no reciben la asistencia de Defensa Civil del distrito de Naván, la provincia de Oyón y la región, manifestó Elizabeth Espada, una de las damnificadas.
La crecida del río Huaura a sepultado varias de las viviendas ubicadas en la ribera del río Huaura en dicha zona, por lo que ahora se encuentran sepultadas por gran cantidad de barro, piedras y arena.
Como las familias damnificadas no reciben ayuda de Defensa Civil local y regional, a pesar de estar aislados y devastados, con lampas y picos en mano están intentado reconstruir lo destruido por el huaico.
Los damnificados con lampas, picos y barretas en mano empezaron a reconstruir sus viviendas, buscando sus pertenencias que están sepultadas bajo gran cantidad de tierra, piedra.
Las turbulentas aguas del río Huaura arrasaron con centenares de plantaciones de manzanas, chirimoyas y otros frutales de las cuatro familias que se radican en el sector de San Miguel.
Estas cuatro familias están aisladas y necesitan apoyo para poder contar con sus alimentos básicos. Por ahora necesitan apoyo con cuerdas para instalar huaros y así poder evacuar el lugar hasta que pase el peligro.
Muchas plantaciones de frutales han sido llevadas por la crecida del río Huaura y otras simplemente han sido sepultados por el lodo, es por ello que estas cuatro familias que lo han perdido todo esperan la ayuda de las autoridades locales y regionales.
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