lunes, 6 de mayo de 2013

21 AÑOS DE LAS DESAPARICIONES DEL SANTA: UN CASO INCÓMODO

La mañana de ayer, los deudos de los nueve ciudadanos desaparecidos en mayo de 1992 en el distrito ancashino de Santa realizaron una romería hacia el distrito de Gaudalupito (provincia de Virú, La Libertad) donde se encuentra la zona denominada Huaca Corral, lugar donde en 2011 fueron hallados los cuerpos de las víctimas.

Acompañados por la Comisión de Justicia Social de la Diócesis de Chimbote, los familiares cumplieron con esta “Ruta de la Memoria”, que partió de la Plaza de Armas del distrito de Santa y llegó a la altura del km 468 de Panamericana Norte, donde hace apenas dos años fueron ubicadas las tres fosas comunes en las que habían sido enterradas clandestinamente las víctimas de Colina.

El grupo colocó flores y retratos de sus seres queridos en la base de las tres cruces de Huaca Corral, colocadas allí dos años atrás, a pocos días de conocerse el hallazgo. Tras esta visita, la comitiva se reagrupó para participar en un “encuentro por la Memoria” en el Cementerio de Santa, donde desde noviembre de 2011 descansan los restos de las víctimas.

El “caso Santa”
Las víctimas, residentes en los asentamientos humanos La Huaca, Javier Heraud y San Carlos, en Santa, fueron sacadas de forma violenta de sus viviendas por sujetos armados y llevados en camionetas pick up con destino desconocido, el 2 de mayo de 1992. La desaparición fue denunciada el mismo año ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y recién en agosto de 2011 los familiares pudieron conocer el destino de las víctimas.

De acuerdo a la Comisión de la Verdad (CVR), el crimen es atribuido al Grupo Colina, cuya intervención habría sido realizada por disposición del entonces Comandante General del Ejército Nicolás de Bari Hermoza. De acuerdo a la CVR y a las denuncias sentadas en la Fiscalía correspondiente, el empresario norteño Jorge Fung Pineda solicitó los “servicios” del destacamento paramilitar para que se “escarmiente” a dirigentes sindicales de la localidad con los que se encontraba enfrentado.

El caso es particularmente polémico y suele ser soslayado de la memoria pública, principalmente porque pone en cuestión el papel que cumplió cierto sector del empresariado durante el ciclo de violencia política que azotó al país entre la década del 80 y el 90, así como los nexos de empresarios con el poder militar en acciones de terror de Estado.

Las víctimas.
Carlos Alberto Barrientos, Roberto Barrientos, Denis Castillo, Federico Coquis, Gilmer León, Pedro Pablo López, Jesús Noriega, Carlos Tarazona y Jorge Luis Tarazona.
Fuente: lamula.pe

No hay comentarios:

Publicar un comentario