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A Félix Susanibar Castro, actual alcalde del distrito de Pachangara, provincia de Oyón, región Lima, la diosa fortuna le ha favorecido y, como en la mitología, le está entregando ciegamente bienes y riqueza (cuidado, que también distribuía males); tras convertirse en burgomaestre de este distrito andino cuya capital es el paradisíaco balneario de Churín.
Con un toque mágico, su casa de un piso del pasaje Santa Rosa 192, del cercado de la ciudad de Huacho, donde su esposa conducía una bodeguita, creció hasta el tercer piso y la bodeguita desapareció. Según sus vecinos, los materiales de construcción llegaban a altas horas de la noche y esas horas eran introducidos al interior de la vivienda, de tal manera que al día siguiente no había ni rastros.
Lo sospechoso del asunto es que este predio no aparece en su “Declaración Jurada de Vida del Candidato”, ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), casa que habita con su esposa y dos hijos hace más de diez años. Félix Susanibar Castro mantiene una deuda ante la Municipalidad Provincial de Huaura, por limpieza pública comercial y seguridad ciudadana comercial, por una suma cercana a los 600 nuevos soles de los años 2005 y 2006. Seguro que no los pagará apelando a la prescripción por el tiempo transcurrido.
Hasta antes de convertirse en alcalde, su modo de vida era la de un modesto profesor primario. El monto que percibía como sueldo era de 1300 nuevos soles, según declara al JNE, menos los descuentos de ley. En esos tiempos la bodeguita les permitía algunos ingresos para completar el mantenimiento de una familia de cuatro miembros, dos de ellos estudiantes.
La casa aparece en la gráfica y delante de ella la camioneta EGE 361, de propiedad municipal, que utiliza exclusivamente como suya propia. Siempre se encuentra en el lugar a pesar de las múltiples y urgentes necesidades de las comunidades alto andinas del distrito. A la ciudad de Huacho ha trasladado la parte contable – financiera de la Municipalidad Distrital de Pachangara, ciudad en la que pasa más tiempo junto a su gerente municipal Pedro Tena Jiménez, dejando acéfala la institución municipal en Churín.
Ésta es la primera vez que se abre una oficina de la municipalidad fuera del territorio del distrito, en el segundo piso de la avenida San Martín 191, Huacho. Los anteriores alcaldes no lo hicieron porque no se justificaba, en el lugar se encuentra de todo. Hay comunicación fluida y cercana a la costa. Los funcionarios trabajaban en el lugar y no se trasladaba el acervo documentario a donde ellos viven, en la ciudad de Huacho.
Según la población, todos los artículos, hasta una hoja bond -así como el diseño e impresión de algún afiche-, son adquiridos o realizados personalmente por ambos personajes en la ciudad de Huacho. Haciendo el papel, ilegalmente, que le corresponde a la oficina de abastecimiento. Al comercio del lugar no les compran ni un alfiler.
(Henry Quiche Bermúdez).
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