MÚSICOS SE LAS BUSCAN SOLO ANTE OLVIDO DE AUTORIDADES NACIONALES, REGIONALES Y LOCALES

LOS OLVIDADOS. Muchos sectores de la población de "Todas las sangres" como decía el genial literato José María Arguedas, están siendo castigados por la terrible pandemia de la COVID-19 y el incomprensible olvido de las autoridades nacionales, del gobierno regional de Lima y los gobierno locales como la provincia de Huaura y distritales, como son los músicos de Huacho, la provincia y la región.

Esta pandemia y la incapacidad gubernamental nacional y subnacional regional y local, viene castigando duramente a los artistas de nuestra zona, entre ellos a los músicos, que ahora y desde la segunda quincena de marzo no tienen contratos musicales o "chivos", por lo que se han visto a afinar sus instrumentos musicales para salir a las calles con la finalidad de alegrar, deleitar, entretener y hacer mover el cuerpo al son de la música, pero al mismo tiempo, para solicitar un apoyo económico a los transeúntes, comerciantes y transportistas que les permitan llevar el sustento económico familiar.

Ante esta situación el gobierno central debería dar un bono especial para los músicos, mientras los gobiernos regional de Lima y las municipalidades provinciales y distritales deberían buscar la forma de apoyarlos como contratarlos por día o semana para que alegren con sus melodías en determinados centros poblados, de tal suerte que los músicos reciben dinero necesario para sus sustento familiar y la población una bonita forma de distraerse y entretenerse en está época de pandemia.

Pero seguramente para esto también no tienen presupuesto el gobierno regional de Lima y las municipalidades provincial de Huaura y las distritales, porque este proyecto de programa social innovador a los tiempos de pandemia no están dentro de sus conceptos y forma de gobernar, por eso hasta ahora no se atreven a modificar sus presupuestos de obras para destinarlos a salud y programas sociales, y prefieren que la gente muera en las calles y en las puertas de los hospitales, en tanto que en las casas y comedores populares faltan alimentos para preparar para sectores vulnerables.