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Al ritmo de las baladas de Camilo Sesto y Ana Gabriel, los familiares del exconsejero regional, Ezequiel Nolasco Campos recordaron el día de su cumpleaños. Hoy la exautoridad de la región Áncash cumpliría 56 años.
Su hija Fiorella Nolasco Blas, junto a sus familiares, llegaron hasta el campo santo Lomas de la Paz, llevando consigo arreglos florales. La joven, quien continúa portando un chaleco antibalas, dejó flores en la tumba de su hermano Roberto Torres Blas, asesinado en el primer atentado que sufrió Nolasco.
Al llegar a la tumba de su padre, Fiorella se quebró y dijo que quienes lo asesinaron deben pagar. Entre lágrimas lamentó que no hayan escuchado las denuncias de su padre.
Consideró que si lo hubieran hecho a tiempo, él no estaría muerto y pidió que la ayuden a encontrar justicia.
La madre y hermana del exconsejero también rompieron en llanto e indicaron no resignarse a su muerte.
Un grupo de personas con polos blancos llegó a acompañar a la familia que llevó pollada, el plato preferido de Nolasco, para un compartir familiar.
Todo ello se dio en medio de un fuerte resguardo policial. Agentes motorizados y de antimotines de la policía se ubicaron en los exteriores e interiores del campo santo.
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