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LO JUSTO. El controvertido ministro de Transportes y Comunicaciones Bruno Giuffra debió llegar a la ciudad de Huacho no solo para comparecer ante las Comisiones de Defensa del Consumidor y de Transportes y Comunicaciones del Congreso de la República que han programado la realización de una sesión descentralizada en esta ciudad este viernes 12 de enero, sino para pedir disculpas por tremenda majadería de reírse de los 52 muertos y sus deudos en la caída del bus de "San Martín de Porres" en la "curva del diablo" de Pasamayo", así como proteger descaradamente a NORVIAL.
Hasta el cierre de la presente edición se sabe que Giuffra no llegará a Huacho a la citación realizada por ambas comisiones del legislativo bajo el pretexto esbozado en una misiva "por compromisos agendados con antelación".
Lo cierto es que el polémico ministro de Transportes y Comunicaciones no es valiente en dar la cara y enfrentarse al pueblo Huacho y del norte chico, que no solo espera sus disculpas, sino que deje de ser el fiel escudero de la abusiva concesionaria NORVIAL, a la que ha defendido con "dientes y uñas" durante el fatal accidente de tránsito que ha costado la vida de muchas vidas huachanas.
Finalmente, para que la sesión descentralizada de ambas comisiones del Congreso no sea un saludo a la bandera debería terminar planteando la revisión integral de la concesión a NORVIAL y que los cuatro legisladores de la región Lima (Melgar, Alcala, Andrade y Robles) dejen de ser "mudos" en este caso" y puedan sacar la cara por el pueblo huachano y del norte chico, porque hasta ahora no han dicho nada contra NORVIAL.
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